Sin importar el activo, donde se tenga intención de realizar alguna inversión, uno de los principales aspectos a evaluar, es el comportamiento del precio del mismo, a lo largo de su historia de cotización en los mercados financieros.
Es por ello que, en la presente oportunidad indagaremos respecto al comportamiento de los precios de la criptomoneda conocida como IOTA, moneda digital, relacionada al Internet de las cosas.
Con el fin de que usted, tenga una mejor noción de lo que significa IOTA, podemos indicarle que es una criptomoneda que persigue el objetivo de respaldar todos los equipos (contados por millones) que pueden conectarse al Internet.
Tales equipos, son de uso diario en nuestras vidas, tanto en el hogar como en el ámbito laboral e industrial, siendo ejemplo de ellos: teléfonos, refrigeradores, lavadoras, máquinas del sector industrial (de diversos tipos de fábricas), y en general de cualquier equipo electrónico que tenga la capacidad de conectar al internet.
Es lo que se conoce, como el Internet de las Cosas o “IoT”.
Como es de apreciarse, y en base a la naturaleza de esta criptomoneda, es normal pensar que tendrá un alcance a nivel mundial toda vez que cada día son más la cantidad de equipos que están conectados al Internet, en virtud de los avances tecnológicos y de la amplia cobertura de Internet en todo el mundo.
A continuación, una serie de aspectos relevantes, que deben ser considerados a la hora de realizar alguna transacción con la criptomoneda IOTA, tales como: breve descripción del funcionamiento de IOTA, seguimiento a los precios de IOTA, proyecciones en los precios, entre otros ítems de interés.
Funcionamiento Criptomoneda IOTA
Fue en el año 2015, en el cual se originó la idea del Proyecto IOTA, y finalmente su lanzamiento en el mercado se llevó a cabo en el año 2017, y difiere principalmente de otras criptodivisas (como Ethereum y Bitcoin) en que no usa la tecnología de blockchain.
En vez de usar blockchain, utiliza el DAG (Gráfico Acíclico Dirigido), también denominado como “Tangle”, y su función principal es la resolución de problemas a nivel de rendimiento y escalabilidad, que tienen afectación en otras divisas de este tipo.
Recordemos que, IOTA es el respaldo de la Internet de las cosas, por lo que el aspecto de la escalabilidad reviste especial importancia por el incremento diario de la cantidad de equipos que tienen la capacidad de conectarse a la red.
Básicamente, IOTA, opera de forma independiente y su proceso está centrado en realizar transacciones con dispositivos que puedan conectarse al Internet, y es capaz de monetizar todos los datos de utilidad generados en equipos inteligentes, tales como dispositivos que hacen rastreo de condiciones meteorológicas y relojes digitales avanzados.
Para lograr su cometido, IOTA, ejecuta un gráfico acíclico, permite ejecutar una gran cantidad de transacciones de forma simultánea, y al mismo tiempo mantiene la premisa que tales transacciones no tengan costes asociados.
Cabe destacar que IOTA, no sólo ofrece múltiples ventajas con la criptomoneda, sino también que tiene altas prestaciones como tecnologías, lo que ha atraído a diversidad de inversionistas.
Como ejemplo de esta tecnología, en adición a sus virtudes como moneda electrónica, está el hecho que mediante IOTA se están llevando a cabo proyectos de Ciudades Inteligentes, mediante el uso de su Tangle que permitirá el monitoreo de la contaminación del aire.
Seguimiento a los Precios de IOTA
Cabe destacar que, en términos generales los precios de las criptomonedas han registrado tendencias volátiles, siendo que en el caso de IOTA, no es una excepción.
Desde sus inicios, en el año 2017 cuando inició con un precio aproximado de 0,16 dólares, hasta finales de ese mismo año cuando alcanzó niveles de hasta 5,79 dólares (siendo su máximo histórico), evidencian tal volatilidad.
Sin embargo, luego de ese pico máximo, experimentó un significativo descenso en el valor de este criptoactivo, siendo que para el año 2018 llegó a un valor de 0,20 dólares, ya para el año 2019 escaló a un nivel de los 0,50 dólares, y posteriormente registró un retroceso hasta los 0,14 dólares en el mismo año.
Para el año 2020, se estabilizó en un monto aproximado de los 0,23 dólares, aun cuando su rendimiento se vio afectado por la crisis del coronavirus, registrando un mínimo histórico de sólo 0,07 dólares.
Para inicios del año 2021, ha logrado alcanzar un precio de hasta 0,49 dólares, que puede interpretarse que este criptoactivo ha logrado superar la crisis causada por el Covid 19.
Proyecciones de los Precios de IOTA
Para lograr una inversión inteligente, en cualquier tipo de activos financieros, adicional al comportamiento histórico de sus cotizaciones, se requiere poner en práctica análisis que tomen en cuenta factores o situaciones del entorno, tanto a nivel económico como de otro variables que puedan afectar el rendimiento financiero.
A tales efectos, y en virtud de los tiempos actuales, es imprescindible sopesar las consecuencias a corto y mediano plazo que pueda tener la crisis del Covid 19 en los precios de IOTA.
En base a lo antes descrito, y de acuerdo a opiniones de expertos, y previa aplicación de herramientas estadísticas, existen predicciones que el precio de IOTA se estabilizará en un rango desde los 0,51 y los 1,34 dólares (en el lapso del 2021 hasta 2025). Así mismo, algunos analistas se aventuran a indicar que este criptoactivo logre un nuevo pico máximo.
Es realmente atractivo y precio de IOTA y sus proyecciones
Tomando en cuenta, todo lo anteriormente expuesto, es evidente que la naturaleza de IOTA, está enfocada en un ámbito de gran crecimiento y alcance mundial, debido a que servirá de respaldo a todos los equipos que puedan ser conectados a la gran red de redes.
En otras palabras, IOTA, como criptomoneda, se apoya en una gran fortaleza como es el Internet de las Cosas, lo cual está demostrado que tiene un auge de gran magnitud en todo el mundo, ya que el avance de tecnología ha permitido que cada día, equipos de uso diario puedan ser conectados a la Web.
Por otra parte, el IOTA, ha logrado atraer muchos inversionistas, no sólo como criptoactivo sino también por el alcance de su avanzada tecnología, que puede ser usada para el desarrollo de ciudades inteligentes.
Tal tecnología, que es distinta al blockchain usado por otras criptomonedas; es conocida como Tangle, que utiliza un Gráfico Acíclico Dirigido (DAG) que ataca directamente a problemas relacionados a la escalabilidad, que si tienen otras monedas electrónicas de este tipo.
En base a sus prestancias técnicas, por un lado, y por otro del comportamiento registrado en sus precios, el IOTA evidentemente representa una atractiva opción de inversión en cuanto a criptomonedas se refiere.